
2do Laboratorio de Narrativas Antirracistas organizado por el CEPER y Tabose plataforma
2do Laboratorio de Narrativas Antirracistas: Claves para desmontar la violencia digital y mediática desde el Caribe
El 3 de febrero de 2025, la Sede Caribe de la Universidad de los Andes fue escenario del 2do Laboratorio de Narrativas Antirracistas, un espacio convocado por el Centro de Estudios en Periodismo – CEPER y la Fundación TABOSE, iniciativa surgida del proyecto de grado de Tatiana Bonilla, egresada de la Maestría en Periodismo, en el cual se debatió cómo combatir la violencia mediática y digital desde enfoques antirracistas, desmontando estereotipos y construyendo herramientas para narrativas que dignifican y reafirman identidades.
Los laboratorios de narrativas antirracistas son espacios en los que se procura romper los formatos rígidos de la academia a través de la exploración. Priorizando diálogos honestos y humanos, conectando voces que han estado aisladas construyendo una red visible de sus luchas y territorios. Este espacio procura no limitarse a denunciar el racismo estructural, sino a también subvertirlo junto a quienes lo enfrentan cotidianamente. El fin es tejer una red antirracista viva entre periodistas, artistas y líderes comunitarios para transformar las narrativas racistas y hegemónicas con herramientas concretas.
En tiempos donde el racismo muta en códigos binarios, algoritmos opacos y titulares disfrazados de neutralidad. Este evento académico se configuró como un espacio de reexistencia, pensando la comunicación como herramienta de dignificación y resistencia frente a las violencias digitales y mediáticas.

Un ecosistema vivo para decolonizar las narrativas
El laboratorio congregó a periodistas, lideresas y líderes comunitarios, artistas, académicos, sabedoras populares y creadores de contenido en un diálogo multiterritorial, donde las voces tradicionalmente excluidas fueron protagonistas. No se trató de una mesa redonda más: fue un acto político y cultural de reapropiación del relato, en el corazón del Caribe.
Ricardo Corredor, director del CEPER, abrió el espacio con una sentencia clara:
“El periodismo debe ser bisturí para diseccionar imaginarios coloniales, no megáfono que los amplifique.”
Desmontando mitos digitales: tres hipótesis bajo la lupa
Desde una metodología de análisis crítico, el laboratorio desarmó colectivamente tres ideas hegemónicas que sostienen la violencia racial en el entorno digital:
- “Las redes sociales son neutrales”: desmontada con ejemplos de censura algorítmica que invisibiliza contenidos antirracistas, mientras amplifica discursos de odio.
- “No necesitan controles externos”: rebatida con datos sobre la impunidad digital y la proliferación de violencia simbólica racializada.
- “El mundo digital es abstracto”: desmentida al evidenciar cómo las dinámicas virtuales profundizan desigualdades materiales, como la negación de servicios financieros a perfiles racializados.
“Aquí no solo denunciamos discursos de odio: los ahogamos con ficciones radicales y archivos que devuelven humanidad a las estadísticas”, enfatizó Diego Grueso, abogado y referente del movimiento negro.
Cinco claves para una comunicación antirracista en el siglo XXI
El laboratorio no se quedó en la denuncia. De la reflexión colectiva emergieron cinco conclusiones orientadas a la acción:
- Alfabetización tecnopolítica para resistir: comprender cómo operan los algoritmos es clave para desmantelar las jerarquías coloniales que se reproducen en redes.
- Contra-narrativas virales para disputar sentidos: memes, pódcast, periodismo de datos y ficción son herramientas poderosas para hackear los discursos hegemónicos.
- Regulación con enfoque decolonial: es urgente promover marcos legales que combatan el odio digital sin silenciar las voces racializadas.
- Los territorios enseñan: prácticas comunitarias de lugares como San Basilio de Palenque o Isla Barú son referentes de comunicación autónoma y antirracista.
- El arte como trinchera política: proyectos como “Rosa Caribe” (Laura Romero) demuestran cómo las narrativas artísticas pueden sanar memorias coloniales y fortalecer identidades.
Redes de cuidado y acción: hacia La gobernanza digital
El cierre del laboratorio fue un acto de compromiso: seguir tejiendo la Red de Comunicadores y Comunicadoras Antirracistas, un esfuerzo articulador entre medios, universidades y organizaciones sociales, con objetivos claros:
- Monitorear las coberturas mediáticas desde un enfoque antirracista.
- Elaborar manuales de estilo que prevengan la reproducción de estereotipos.
- Incidir en políticas públicas para una gobernanza digital inclusiva y equitativa.
“No basta con estudiar el racismo: hay que hackearlo desde adentro con herramientas que nazcan de quienes lo resisten”, concluyó Tatiana Bonilla, de la Fundación TABOSE.
Un laboratorio para reimaginar la comunicación
Lejos de ser un encuentro coyuntural, este segundo laboratorio consolidó un proceso de largo aliento: la construcción de narrativas que partan de las experiencias y saberes propios, descentrando la mirada europea y apostando por una comunicación que no solo informe, sino que también repare, empodere y transforme.
Porque en tiempos de desinformación y violencia simbólica, hacer periodismo antirracista es también un acto de justicia histórica.
Agradecimientos especiales a:
- Ricardo Corredor (Director del CEPER)
- Diego Grueso y Tatiana Bonilla (Fundación TABOSE)
- Kira González (Comunicadora Social)
- Ricardo Chica (Decano de Ciencias Sociales, Universidad de Cartagena)
- Samoa Robles (Historiadora)
- Catalina Vela (Gestora Cultural y Licenciada en Artes Escénicas)
- Laura Romero (Abogada, investigadora y docente)
- Rafael Bossio (Fotógrafo, artivista del Colectivo Imagina Cartagena)
- Jaure Solano (Gestor cultural, comunicador, guionista y docente)
- Leidy Chaverra (Sabedora popular)
- Susana Taborda (Miembro del Movimiento de Mujeres Negras y Periféricas – MARE)
- Mayker Inés Rueda (Miembro Misión de Paz)
- Nelson Rafael Jiménez (FUNCICAR)
- Iván Cárdenas (Fundación Gabo/Universidad de Cartagena)
- Juano (Maestro en Artes Escénicas)
- Francisco Valdez (Líder social del Colectivo Isla Barú)
- Cecilia Caballero (Magíster en Conflicto y Construcción de Paz)
- Laura Romero (Comunicadora & Magíster en Desarrollo y Cultura, creadora de «Rosa Caribe»)